ENVIADO ESPECIAL // EHA desde España
Muchas son las posibilidades de recorrer lugares nuevos. Pocas son las posibilidades de una productora que recién empieza a funcionar, de contar con enviados especiales en el Mundo. Pero una vez más, El Ladillón, lo consigue.
El 19 de Enero, llegó el corresponsal al Viejo Continente, más precisamente, a la Madre Patria. Muchos son los lugares que he recorrido desde mi llegada. La Sagrada Familia, La Catedral de Barcelona, El Barrio Gótico, El Museo de Dalí, etc, etc. Pero mi mayor sorpresa, fue llegar al Camp Nou (estadio donde juega de local el Barcelona F. C.) donde deseaba sacarme la típica foto, en la puerta de la cancha, con mi casaca de Boca y obviamente, la de mi querido equipo, Ladilla F. C. Pensando en sorprenderme con ver desde lejos a Ronaldinho, Saviola, Samuel Eto`o, o algún que otro crack del futbol mundial, desde lejos, divisé unos colores que me parecían familiares… demasiado. Comencé a correr dando saltitos para ganar velocidad (como me enseñó mi amigo personal DJ Juanma) en dirección a la puerta de estadio. Cada vez que me acercaba, se me llenaban los ojos de lágrimas, y el corazón me latía más fuerte. Y ahí lo ví, resplandeciendo con la combinación de colores que mas deleitan. Ahí, estaba CHECHO. Pero no era solo "Checho", era Checho quien estaba sacándose la misma y típica foto en la puerta del estadio. Y para mí sorpresa, esa foto, era con la camiseta del ya reconocido equipo del futbol argentino Ladilla F. C. Checho, besaba la camiseta, la olía y sacaba una y otra foto. Yo me quede inmutada, dura. Sin saber que decir, con mi camiseta en la mano, me acerqué despacio y le mostré mi camiseta. Checho empezó a llorar. Sin decir palabras, me abrazó. Quise preguntarle muchas cosas, pero solo pude decir: "Gracias".
Nos fuimos alejando del estadio, luego de sacar fotos. Fuimos al Corte Ingles. Ya más tranquilos, sentados tomando un café con mezcla de alegría y nostalgia, comenzó la charla. Checho empezó a contarme que seguía a Ladilla desde nuestra querida gacetilla. Que no acudía a los encuentros del campeonato Eh` Amigo de La Boca porque vive en Lomas de Zamora. Dice que la camiseta, la consiguió porque lo vio a Jeremias De Rosa en un espectáculo de teatro under y con el corazón palpitándole fuerte, lo reconoció y este le dio su camiseta, prometiéndole que le presentaría a Silvina Luna. A Checho, no le importo la vedette, solo le inspiraba amor el hecho de saber que todas las noches, podría dormir abrazado a la camiseta de Ladilla F. C. Desconsolado, Checho, me preguntó si era de la barra brava, a lo que contesté que el jefe es Miti Mitin y sus secuaces. Al instante respondió, Melina, Matías, Julieta. Conocía a todos, jugadores, cuerpo técnico, preparadores físicos, hinchas y comisión directiva. Su única duda era si Cutu, era parte de la planilla profesional del equipo o si era ayudante de campo de Beto.
El encuentro culminó, volviendo al estadio, y Checho, sacándose una nueva foto con mi camiseta.
Y si amigos, Ladilla despierta amores en todos los lugares del mundo. Ladilla es grande y lo es por la gente que tiene. Ladilla no solo llena canchas de local o visitante, sino que también, es conocida en todos lados, y no por el despliegue futbolístico. Tampoco por la táctica que impone su DT. Es Inmenso porque todos cuando sean grandes quieren ser como Ladilla.
