FUTBOL // U Nico

Con tres goles de Nico Paz, uno de Tavo y otro de Jere (si, leyó bien) Ladilla venció a Rodriguez Peña 5 a 2. Con el triunfo el equipo de Gerli comparte la punta del campeonato con Quilmes.

“Viva el fulbo, viva la patria” grita un hincha de Ladilla luego de delirar con los goles de Nico Paz, un ñoca de Diego, las proyecciones saltarinas de DJ, incluso hasta con la caída en slowmotion de Sauloneta por el andarivel derecho con la música de Carrozas de Fuego de fondo. Cinco pepas no se dan todos los días y menos la punta del funesto Campeonato Eh! Amigo de La Boca. De esta manera, se podría decir que el team oriundo de Gerli goza de una primavera camporista similar a cuando Diego fasea en la Plaza Arata con Miguel.
A pesar de todos los artilugios de Claudio Megustalatarasca en poner a Ladilla un domingo a la matina con todo lo que ello significa (fandango, minas y curdas) el team ladilloso se hizo fuerte en el estadio de Rodriguez Peña y venció al local por 5 a 2. Para ello, el conjunto dirigido por Beto, (por una lesión en el tobillo Ale también cumplió la función de DT), formó de la siguiente manera: Daminato al arco; Saulo, Andrés, Jere y DJ en la defensa; Pujo, Javi, Diego y Tavo en medio; y Cali y Nico Paz en la delantera. (ver formación y premios)
Podríamos empezar el relato del primer tiempo citando las almendras de Nico Paz y compañía pero antes cabe preguntarnos… ¿Cuándo Ladilla hizo cuatro pepinos en 35 minutos?, ¿alguna vez Ladilla metió un gol haciendo cuatro/cinco paredes seguidas?, ¿Cuánto sale la merluza que toma Pujo?, ¿Gonza está “coghlanizado”?, ¿Por qué de chiquito nos creemos vivos buscando palabras en el diccionario como “culo”, “teta”, “pito”, etc.? Responder tantos interrogantes es difícil, por lo que nos volcaremos a comentar, con la objetividad que nos caracteriza, el desarrollo del partido.
Desde el minuto cero pudo observarse un equipo ladilloso con ansias de quedarse con los tres porotos y alcanzar a Quilmes en la punta. Tal es así, que anterior al primer quinoto hubo dos goles anulados a Ladilla. El primero porque Pujo le confesó al referí haberse comido un traba en Amerika y el segundo porque Diego adquierió un nuevo poronguero aunque con luces de colores. Pero Ladilla no se desanimó y llegó a la primera conquista con un “Gol Jere” de Jere. Para aquellos que no saben, un “Gol Jere” es un gol de atropellada. O sea, es un gol estéticamente feo, que conlleva una serie de rebotes (mínimo cinco), se define pegándole mal al balón, y en algunos casos (antes de que el esférico pase muy lentamente la línea de cal) debe gritarse con furia “Dale, dale Huracán yo soy quemero” o “Y ya lo ve, y ya lo ve, es la gloriosa C.G.T. Viva Perón, carajo”. Incluso, dicho gol, que porta a esta altura holograma de autenticidad, fue celebrado por su dueño con el banderín del corner con el paso de la sombrilla. Claro que tal festejo ocasionó que un que otro jugador de Rodriguez Peña (Roque), con cara de pocos amiguitos, moviera su manito hacia arriba y hacia abajo con cuatro dedos pegaditos y el pulgar alzado, en un claro gestito de “Que festejá pelado puto? Ahora te vamo` a dar leña”. Igualmente el conjunto tricolor no se dejó intimidar y a los pocos minutos con un latigazo certero de Tavo de afuera del área puso el 0-2 en el marcador electrónico. Si bien no pudo corroborarse, existe una hipótesis que señala que si Tavo mojaba, alguien le regalaba un totin de mejor calidad al vinagre que canjea por unos cuantos corchos. Encima, seguido a la segunda pepa vino una avellana bañada en dulce de leche de Nico Paz que coló por el segundo palo. 0-3 y la hinchada visitante aplaudía la elegancia brindando con champán. Pero eso no sería todo. Tras un tiqui-tiqui-tiqui-taca entre DJ, Cali, Tavo, Diego y Javi, Nico Paz definió con un turrón de Jijona que hizo enloquecer una vez más a la algarabía ladillosa. El 0-4 peronista hizo que el referí de por finalizado los primeros 35 mnutos del deporte más hermoso.
En el segundo tiempo, Ladilla salió con la almohada bajo el brazo y Garay descontó. 1-4 pero el conjunto ladilloso continuaría manteniendo la posesión de la pelota, aunque sin poder llegar al quinto pepino. Las chance se despreciaban, el rival se agrandaba y Saulo quedaba expuesto al insulto sindical por parte de Jere y Beto, quien a media mañana ya le estaba entrando a un bife de lomo. Pero Tavo, que tumbaba a sus marcadores con su aliento de buey (vaya uno a saber que habrá bebido la noche anterior), agarró la posta y descargó para el Grupo Cali. Este sacó un fierrazo que el arquero de Rodriguez Peña (Luis), pasado en postres, no pudo contener, lo que le permitió una vez más a Nico Paz llegar a la red. 1-5 y la hinchada visitante que copó el Rodriguez Peña Stadium cantaba “con huevo, con goles vamo` a salir campeones”.
Tanto era el bullicio, el carnaval, el jolgorio que ni se notaría que el local descontaría nuevamente.