FUTBOL // Ambiciones y egoísmos

El escándalo ya está instalado. El goleador Alejandro García y la revelación Nico Paz ya no se soportan en la convivencia del equipo. Esta es una realidad tan fuerte que hasta desbordó las explicaciones de compromiso y las sonrisitas forzadas con las que suelen esconderse estas situaciones en un medio como el campeonato Eh! amigo de La Boca, tan proclive a las apariencias e hipocresías. Tan fuerte es esa realidad que hasta supero al D.T. Shampy, acostumbrado a acordar y pelearse con los organizadores del campeonato. Algo extraño en quien supo controlar relaciones conflictivas como las que tuvieron Largui y Pujo o Diego y Adrián. Como muchos, Shampy tal vez no esperaba que el “Seducido” explotara tan rápido, algo que tampoco imaginaba García, que se siente bajoneado por el protagonismo que le está sacando en los partidos. Ser goleador de Ladilla F.C. no solo demanda gran talento, disciplina y buena fortuna, sino también una importante cuota de ambición y egoísmo. Por eso García asumió que Paz es más rival que compañero y jugó sus cartas. No le importó que perjudicara al equipo. El choque de semejantes ambiciones y egoísmos no podía terminar en otra cosa que en un escándalo.

Para El Ladillón
Santos Biasatti