FUTBOL // ¿Y qué me decis de Ladilla?
El equipo está del marulo. Ganó con dos pepas (una de la China Wo aunque uds. no lo crean) y sigue manteniendo las esperanzas de ganar el campeonato
Al igual que Noberto quien se acostumbró a hablar anteponiendo la letra C en lugar de la P (léase cricta o Pecsi), Ladilla parece haber encontrado el mismo rumbo pero en lo que respecta a familiarizarse con el triunfo.
Tras dos meses y medio sin conocer la derrota, incluso alistando a jugadores que besan focas y hablan con palabras tales como “lodo”, “carretera”, “computador” y/o/u “excusado”; es que científicos de todas partes de mundo continúan buscándole una respuesta a tal fenómeno deportivo. Una de las hipótesis que se baraja actualmente refiere a la mejora en el rendimiento individual de ciertos jugadores, como por ejemplo, el caso del concubino oriental quien se lo nota más motivado luego de que Sonia (por ser a pocas cuadras del nido de amor que comparten) le dio permiso para entrenarse. Otra teoría hacía hincapié en que Leo había dejado los malos hábitos, aunque fue rápidamente descartada luego de que la embajada de Paraguay solicite pedido de captura a través de Interpol por contrabandear menores y prostituirlos.
Por más investigaciones y tesinas que se desarrollen en base al presente del conjunto ladillento, como diría el General Perón, la única verdad es la realidad; y tal realidad indica, señala, marca, revela que Ladilla Fútbol Club hace seis partidos que no pierde. Parece ser que en este campeonato los astros y la cabeza de Diego se han alineado de tal manera que han permitido no solamente lograr un record único de victorias sino también el tan recordado cambio de frente y la tan celebrada valla invicta luego de más de siete años.
Pero vayamos a los que nos incumbe. Tras derrotar a la Vagancia de Casa Amarilla con un jugador menos y con Mingo en cancha, los lady boys enfrentaban al poderoso y siempre complicado Tren Argentino. Para ello el equipo formó de la siguiente manera: John Bonachon como cancerbero; el 4 Astilla, Shampy, Jere y DJ Cefa como aguerridos defensores; Puchito, Pujo, Tio Huevo y Tavorracho como volantes autóctonos; y Diego Omar y El Mago como temibles delanteros. (ver formación y premios)
El primer tiempo, a pesar de haber terminado en cero, fue de ida y vuelta. El Tren Argentino con Shoppy como estandarte manejó y controló el esférico casi todo el partido pero el team tricolor fue más peligroso debido a que llevó a cabo el ponderado y famoso contragolpe talibán, el cual Cutu conoce a la perfección. Solo podemos nombrar una sola jugada clara de gol por parte del conjunto visitante, en donde luego de unos doscientos cuarenta tres corners, uno de ellos se estrelló en el travesaño mientras Daminato degustaba un vino patero que le había traído su novia de tierras mendocinas. Por otro lado, El Mago siempre complicó a la valla de Tren Argentino con su potencia y Diego con su lunarote titánico. Tal es así, que a los 26 minutos, tras un pase de Tavorracho, el referí impidió a La Fantasía desparramar avellanas y gotitas de champagne cobrando offside cuando se iba solo para definir (tal vez de rabona). Por lo tanto con un DJ zapeando discos con los pies y truco Leo lesionado se bajaba el telón de la primera etapa.
En lo que compete al segundo tiempo, con Tete en la cancha por su pedófilo hermano, Ladilla se aventajaría en el marcador electrónico ni bien comenzado este. Un bochazo como de costumbre partió de la defensa con destino incierto. Tren Argentino decidió emplear la ley del off-side pero Diego Omar partiendo de atrás y corriendo como cuando dejaba pagando a sus amigos de la infancia para ir a ver Los Campeones, se fue de marote al gol definiendo por encima del catatónico arquero. 1 – 0 y Diego estaba más feliz que cuando sacaba créditos y créditos en los fichines de Power. Dolido en la derrota el conjunto de Tren Argentino fue por el empate. Pero el único modo que tenía de atravesar el muro defensivo era por el lado de Jere con afiches de Blanca Armoa o con centros a la olla popular provenientes de cornes y tiros libres. Optaron por la segunda opción. Así a los 14 minutos un corner-bomb efectuado desde la izquierda cayó en plena área ladillosa quedándole servido el chuteo al obeso delantero rival. Mariano no pudo evitarlo pero Juan emulando a Kempes en el 78 atajó el remate. Penal y expulsión marcaba el libreto. Y fue así nomás. Pero Daminato con su fuerte personalidad húngara intimidó tanto al delantero que este decidió patear el penal afuera. Desmotivado el adversario, y agrandado el team tricolor Ladilla sentenció el resultado con una alcachofa de Tavo que se coló despacito en el segundo palo. 2 – 0 y fin del partido.
A pesar de estar a seis puntos, esta nueva victoria permite ilusionar a jugadores, cuerpo técnico, lectores e hinchas con alcanzar el primero puesto en el campeonato. Ladilla vive un sueño del cual no quiere despertarse jamás.



